Mientras Tom Brady hizo historia en el Super Bowl LI, el aficionado número uno del ’12’ de los Patriotas se encontraba perdiendo la batalla más importante de su vida.
Logan Schoenhardt, de 10 años, fue diagnosticado con un tumor cancerígeno, por el cual fue sometido a cirugía de alto riesgo para remover el tumor. Tras varios meses de cuidados intensivos, el tumor regresó a Logan y nuevamente se programaron varias cirugías.
“Él sabe que nunca podrá jugar futbol americano, pero el vive su sueño a través de Brady”, declaró su madre.
En marzo de 2016, Logan se sometería a una nueva cirugía, pero no antes sin pedirle un favor al médico: que le colocara el número 12 dentro de su craneo en honor a su más grande ídolo, Tom Brady.
La desgarradora historia llegó hasta los oídos de Brady quien mandó un mensaje de apoyo.
Para finales de 2016, Logan junto a su familia, recibieron la peor noticia de su vida, el tumor había regresado, pero esta vez ya no había nada que hacer.
El 3 de diciembre, el día más esperado para el pequeño, de 10 años, llegó; conoció en persona a su mayor ídolo. Además, fue invitado al partido que los Patriotas sostuvieron ante las Águilas de Filadelfia.
Lamentablemente, Logan perdió la batalla contra el cáncer el día de ayer, por lo que los Patriotas mandaron un mensaje, a través de Twitter, a la familia del aficionado número uno del equipo de Nueva Inglaterra.
