Un tatuador brasileño después de 25 años de transformaciones, se convirtió en el Satán humano del mundo; desde los 19 años, expresó su deseo de cambiar su aspecto físico para lograr la apariencia de un demonio.
Tuvo que someterse a un gran número de operaciones, muchas de ellas complicadas: amputación de dedos, de nariz, implante de cuernos sobre la cabeza, de colmillos, orejas y tatuajes sobre el rostro. La última intervención de Michel Faro do Prado ha sido ponerse un implante de dientes de plata, cuyo precio asciende a 800 euros.
“Tengo una buena tolerancia al dolor, pero el postoperatorio es el momento más difícil para mí; la verdad es que hay operaciones que sin anestesia serían imposibles de realizar”.
“A veces me gustaría no sentir tanto dolor”, reveló en entrevistas; a pesar de que muchas personas de su entorno consideran su transformación una completa locura, el tatuador contó en todo momento con el apoyo de su pareja, quien ha estado a su lado durante el proceso.
El resultado se puede ver en su perfil de Instagram donde va compartiendo sus cambios; actualmente cuenta con más de 89 mil seguidores en la red social.