Unos estudiantes encontraron a una bebé abandonada, envuelta en una manta delgada dentro una caja de huevo, en un sector del pueblo Sosnovka en Siberia.
Dicho lugar es considerado como uno de los más fríos del mundo y en estas fechas, llega hasta los 20°C bajo cero, según reportes.
Cinco adolescentes a pesar del intenso frío, salieron a caminar a las 6:20 hora local a las afueras del pueblo; durante su trayecto escucharon un chillido y al acercarse a dónde provenía el sonido, descubrieron a la neonata.
Los jóvenes quedaron “en shock” durante los primeros minutos e intentaron detener a algún automóvil para trasladar a la pequeña, pero ninguno les hizo caso y llamaron a los padres de uno de los presentes.
“Mi esposa y yo llegamos en 3 segundos, subimos al auto y volamos ahí”, narró Dmitry “N”, el adulto que acudió al llamado de su hija junto a su esposa Anna “N”; esta última admitió que en un inicio, no pensó que se trataba de un recién nacido: supusieron que sólo era un niño que se había perdido.
Dmitry y Anna al llegar al lugar de los hechos, confirmaron lo dicho por los menores; incluso tenían temor de tocar a la bebé, así que la trasladaron a un centro médico con todo y caja de huevos.