Autoridades de Egipto declararon a Hanaa Mohamed Hassan, de 29 años como "criminalmente demente" por lo que se determinó que no estaba en condiciones mentales para poder declararse culpable. Esta mujer habría devorado la cabeza de su propio hijo después de haberle quitado la vida.
Debido a su situación mental, las autoridades detendrán a la mujer de 29 años dentro de una unidad psiquiátrica segura.
Los hechos ocurrieron en la localidad de Faqous, al noreste del El Cairo, cuando la madre de éste decidió encerrarse dentro de la casa, donde con la ayuda de un objeto contundente, le quitó la vida al menor de edad, después con al ayuda de un machete, esta partió el cuerpo del bebé.
En su ataque psicótico, está decidió decapitar el cadáver del niño y puso hervir la cabeza del niño y se comió los restos humanos, esto para que "se quedara con ella para siempre". El ataque habría iniciado por un proceso de divorcio donde esta perdiera la custodia de menor.
Pero el tribunal ordenó una evaluación más detallada de su estado mental, y un panel de expertos psiquiátricos designados por el tribunal concluyó que Hanna estaba "delirando" y tenía nociones descabelladas de que sus familiares estaban usando brujería contra su hijo.
Esta permanecerá en el Hospital de Salud Mental y Neurológica Abbasia de El Cairo hasta que se decida que hacer con la mujer.