Un terremoto de 7,2 grados Richter ha sacudido la costa este de Taiwán, dejando a casi mil personas atrapadas en las montañas del Parque Nacional Taroko, según informes de la agencia estatal de noticias CNA.
Las autoridades del parque estiman que al menos 654 turistas y empleados se encontraban en la zona en el momento del sismo, con un número adicional ingresando después del evento, elevando la cifra total de varados.
El Parque Nacional Taroko ha establecido un centro de emergencias y está en proceso de contactar a los equipos de montañismo uno por uno para evaluar la situación, aunque aún no han determinado el número exacto de personas en las montañas.
Las labores de rescate se han visto obstaculizadas por el cierre del parque, programado hasta el 7 de abril, y la interrupción del transporte terrestre debido al colapso de tramos de carretera y bloqueo de la autopista Suhua.
El condado de Hualien, epicentro del terremoto, ha sufrido las peores consecuencias, con al menos cuatro personas fallecidas, incluyendo tres montañistas y un camionero, según las autoridades locales.
La cancelación de trenes con destino a Hualien ha complicado aún más las operaciones de rescate y la evacuación de los afectados.
El presidente electo y actual vicepresidente de Taiwán, William Lai, tiene previsto visitar Hualien para evaluar la magnitud del desastre y supervisar las labores de rescate. Mientras tanto, el Parque Nacional Taroko permanece cerrado y se insta a los visitantes a evitar áreas dañadas por el sismo.