Este viernes, el dólar cerró en su nivel más alto desde septiembre de 2022, mientras que el peso mexicano acumuló su tercera semana consecutiva de depreciación, impulsada por la proximidad de las elecciones presidenciales en Estados Unidos y la posibilidad de una victoria del republicano Donald Trump. El tipo de cambio en el mercado mayorista registró una pérdida semanal de 1.7%, situándose en 20.29 pesos por dólar, el nivel más bajo del peso en dos años.
En el mercado de divisas internacional (Forex), el dólar subió 29.74 centavos entre el 25 de octubre y el 1 de noviembre, presionando aún más al peso mexicano, que ha mantenido una tendencia negativa en las últimas semanas. A nivel minorista, la moneda también reflejó este ajuste, registrando un incremento de 26 centavos en su tipo de cambio semanal. Esta escalada en el dólar ha sido observada de cerca por analistas que consideran que la situación económica y política en Estados Unidos influirá en el mercado cambiario mexicano en el corto plazo.
Gabriela Siller, directora de análisis económico y financiero en Banco Base, atribuyó la caída semanal del peso a un aumento en la aversión al riesgo ante las elecciones estadounidenses. Analistas de CI Banco coincidieron en esta interpretación, señalando que la expectativa de una posible victoria de Trump sobre Kamala Harris en los comicios del 5 de noviembre genera inquietud en los mercados.
Esta semana, el peso mexicano fue la tercera moneda con peor desempeño global, superada solo por las divisas de Brasil y Colombia, lo que evidencia el impacto de la incertidumbre política en la región y las proyecciones sobre un posible retorno de Trump a la presidencia.