HERMOSILLO, SONORA. - Alguna vez nos ha surgido la pregunta sobre qué es necesario y qué no es necesario meter al refrigerador. En esta ocasión, hablamos sobre las papas y la cebolla específicamente y te damos las razones por las cuales, expertos no lo recomiendan.
Según la Chef Mariana Orozco, mencionó que guardar las papas en un lugar frio podría traer consecuencias.
Según sus declaraciones, el almidón presente en las papas se convierte en azúcares libres cuando se refrigeran, lo que puede afectar su sabor (hará más dulces a las papas), oscurecer su color durante la cocción y, lo más preocupante, puede contribuir a la formación de acrilamida, una sustancia considerada cancerígena.
De acuerdo con La Administración de Alimentos y Medicamentos de los Estados Unidos (FDA), la acrilamida es un compuesto químico que se forma naturalmente en alimentos de origen vegetal ricos en almidón, como las papas, durante procesos de alta temperatura, como la fritura o el horneado.
Además de las papas, las cebollas también entran en esta incógnita sobre si deben refrigerarse o no, así que de igual manera la chef Mariana Orozco, asegura que la humedad del refrigerador puede provocar que las cebollas se humedezcan rápidamente y se echen a perder más rápido. Sin embargo, aclara que las cebollas cortadas sí deben ir en el refrigerador, al igual que el cebollín y las cebollas de cambray, debido a su mayor contenido de agua.
¿Cómo se deben almacenar las papas y las cebollas?
• Almacena las papas en un lugar fresco, oscuro y seco, preferiblemente a una temperatura entre 7 y 10 °C. Evita el refrigerador.
• Mantén las papas alejadas de la luz directa y en un recipiente opaco o cubiertas con papel periódico.
• Revisa regularmente las papas y desecha aquellas que presenten signos de deterioro, como manchas, brotes o pudrición.
• Almacena las cebollas en un lugar fresco, seco y bien ventilado, lejos de la luz directa del sol.
• Evita la humedad excesiva y no refrigeres las cebollas enteras.
• Revísalas periódicamente y desecha aquellas que muestren signos de deterioro, como manchas blandas o moho.
Cabe mencionar que, es importante tener en cuenta que las cebollas y las papas tienen necesidades de almacenamiento distintas debido a sus características y composición.