Un poco más de 388 niños mexicanos que han sufrido quemaduras de gravedad se les ha negado el acceso a los Estados Unidos, donde estos esperaban ser atendidos en los Hospitales Shriners, los hospitales pediátricos más avanzados del planeta, esto por órdenes del presidente Trump.
Los hospitales infantiles Shriners son administrados por Shriners International, una organización sin ánimo de lucro cuyo objetivo es brindar atención médica a menores que han sufrido quemaduras, lesiones de médula espinal, labio leporino, fisura palatina o afecciones ortopédicas.
Ahora, el presidente del Club Shriners en Tijuana, José Jesús Bernal Ibarra, señalo a un periódico local que debido a que él presiente Trump ha suspendido las visas humanitarias, cientos de niños que buscaba tratamiento médico, no han podido ser atendidos.
La rama benéfica de los Shriners son los Hospitales infantiles Shriners, una red de 22 hospitales que están ubicados en los Estados Unidos, México y Canadá. Los hospitales inicialmente fueron construidos para tratar a las víctimas jóvenes de la poliomielitis, pero una vez que la enfermedad fue controlada, decidieron continuar con su servicio.