En plena navidad, un enorme contingente de migrantes, que se denominaron como "Éxodo de la pobreza", salieron de la ciudad de Tapachula con destino a Estados Unidos. Se estima que el tamaño de esta nueva caravana es de hasta 10 mil personas.
La caravana llegó al ejido Álvaro Obregón para después continuar su travesía al norte del país.
"Llevamos de tres a cuatro meses en Tapachula esperando, pero no tenemos lo que es respuesta”, dijo el hondureño Cristian Rivera, quien dejó a su esposa y su hijo en Honduras y viajaba solo.
"Esperemos que con esta caminata podemos realizar un cambio y nos puedan dar el permiso para poder subir arriba”, expresó.
Como en otras ocasiones, el grupo salió coincidiendo con citas importantes en la agenda migratoria y, en este caso, tiene lugar días antes de la llegada a Ciudad de México del secretario de Estado, Antony Blinken; el secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas, y la asesora de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, Elizabeth Sherwood-Randall, enviados por el presidente Joe Biden para intentar pactar nuevas medidas migratorias con López Obrador.
Aunque se desconoce la fecha de llegada de la nueva caravana, este llega en un momento de alta tensión en la frontera texana, donde el gobernador a mantiene una férrea retórica antiinmigrante, al igual que el estado de Nuevo México.