LA IDIOSINCRACIA DEL MEXICANO, es única en el mundo, pues el ingenio y la picardía, es común en el folklor popular de este México lindo y querido.
LOS APODOS, es una singular manera de bautizar del pueblo mexicano, pues casi siempre los apodos les viene a la medida, en México, muchos tienen esa habilidad.
CONOSCO A UN AMIGO QUE LE DICEN LA BOLA 8, pues es de color serio y esta calvo, en alusión a la bola de billar que es de color negro.
A OTRO AL INGRESAR A UN CLUB DE SERVICIO, en la primera reunión, es costumbre que los bauticen, el nuevo socio dijo, no sé cómo me van a decir, si no tengo cola que me pisen, LE PUSIERON EL JOLINO.
HASTA LA PRÓXIMA.