Trabajadores del Anexo Sanaréh entregaron a hijo inconsciente a sus padres, murio tras 4 días hospitalizado por el derrame cerebral severo, el centro aseguraba que su adicción terminó con su vida.
La señora Flor Ramírez y Abundio Rubio, externaron que su hijo David Raymundo Rubio de 31 años de edad tenía 9 meses internado en dicho anexo,
"No supimos que pasaba porque una vez se escapó del anexo y cuando lo volvimos a ver ya estaba muy flaco, sus compañeros dicen que nos dicen que lo dejaban sin comer días o meses".
Fue el 15 de marzo cuando el entonces encargado de el centro de rehabilitación se los entregó inconsciente mencionando que estaba enfermo y había amanecido sin comer, pero en realidad sufría de un derrame cerebral severo, supuestamente debido a las drogas que consumía.
Raymundo no fue aceptado en la Cruz Roja debido a el estado de salud tan crítico y fue en el Hospital Amparo Pape donde se le dio la atención, requirió de intubación y aunque se hizo lo que se pudo, perdió la vida cuatro días después.
Sus padres mencionan que por miedo al poder que tiene el centro de rehabilitaciones que no alzaron la voz pero el ver que más personas empezaron a señalar los malos tratos es que eso les dio el coraje para pedir justicia.
"Mi hijo tenía golpes en su frente y tenía la garganta inflamada, mi hijo ya no volvió a abrir sus ojos cuando lo internaron, a nosotros nos tocó verlo postrado en la cama e intubado", dijo Flor Ramírez.
Ahora que varios internos pudieron salir gracias a las acciones de sus papás, es que se dieron cuenta que a su hijo le hacían bullying ya que no lo dejaban ni agarrar una tortilla para mitigar su hambre.
"Incluso los mismos compañeros dicen que ellos creían que mi hijo estaba enfermo y que por eso lo habían trasladado, ellos no saben que en realidad falleció y las lesiones que tenían".
Señalan que el entonces dueño del anexo solamente estuvo con ellos dos días para asegurarse que Raymundo no hablara de lo ocurrido dentro de las instalaciones, e incluso hizo una rifa para ayudar a la familia pero el dinero jamás fue entregado.
