México.- Andrés Manuel López Obrador y Enrique Peña Nieto se reunieron por tercera ocasión en Palacio Nacional como parte del proceso de transición tras la elección presidencial de 2018.
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En conferencia de prensa, el presidente electo y el presiente en funciones fueron cuestionados sobre su postura con respecto a la exlideresa del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), Elba Esther Gordillo, quien este lunes reapareció en la escena pública tras su liberación.
Peña Nieto, quien fuera contendiente del tabasqueño en la elección presidencial de 2012, indicó que en la Procuraduría General de la República (PGR) se encuentra en curso las impugnaciones contra la liberación de la ex lideresa magisterial, sobre quien dijo “para este gobierno no reviste mayor trascendencia”.
Por su parte, López Obrador enfatizó que existe un proceso legal, “si ella es declarada inocente, libre, se tiene que respetar su derecho de participación” y añadió que su objetivo es cumplir dos compromisos hechos en campaña.
De acuerdo con el presidente electo, los compromisos hechos se refieren a la no intervención en los asuntos internos de los sindicados, así como a garantizar la democracia sindical, “queremos democracia como forma de vida, por eso en los asuntos sindicales vamos a promover que se respete la voluntad de los trabajadores”.
Este lunes 20 de agosto, el gabinete del presidente en funciones y el gabinete del presidente electo se reunieron a puerta cerrada por primera vez desde la contienda electoral del pasado 1 de julio.
