El rechazo de los clubes del Ascenso MX a transformarse en una Liga de desarrollo es unánime.
Los 12 equipos se oponen a perder la opción de ascender a cambio de un incentivo económico, ya que eso condena la oportunidad de crecimiento y desarrollo futbolístico.
“Es unánime. Todos queremos que haya ascenso, los 12 equipos queremos que haya ascenso y descenso”, dijo a Grupo REFORMA el presidente de Mineros, Armando Martínez.
Una franquicia que sube a la Primera División incrementa entre 40 y 50 veces las ganancias, pero los federativos pretenden bloquear dicha opción durante 5 o 6 años y que así los clubes se enfoquen solo en el desarrollo de futbolistas.
“Estamos muy unidos desde la vez pasada que se quiso quitar el ascenso, se logró una unión muy importante, y desde ahí nos dimos cuenta de que debíamos hacer cambios estructurales en nuestra Liga, y uno de ellos era precisamente hacerla más atractiva. También nos juntamos para ver qué teníamos que hacer para que llegaran más recursos, porque también es un hecho que financieramente no son rentables los clubes del Ascenso, pero los ingresos de Primera División con respecto a los de Ascenso, estamos hablando de 40 o 50 veces más cuando logras ese paso.
“Si le preguntas a Juárez cuánto va a ingresar en pura venta de abonos, en derechos de televisión y en esquilmos y patrocinios, si le preguntas el presupuesto del año pasado, te vas a dar cuenta de que es entre 40 a 50 veces mayor. El problema no es que el equipo de abajo no sea rentable para cuando pase a Primera. Claro que tenemos que buscar que todos los equipos sean rentables, eso es forzoso”, expresó Martínez.
