SALTILLO, COAHUILA.- La mañana de este domingo, el sector transportista de la ciudad se congregó para cumplir con una de sus tradiciones más arraigadas: la peregrinación anual al Santuario de Guadalupe.
Desde las 10:00 horas, conductores de taxi, tráiler, transporte público, de personal, paquetería, materiales e incluso operadores de maquinaria pesada comenzaron a reunirse en el cruce del bulevar Isidro López Zertuche y el periférico Luis Echeverría, punto que marcó el inicio del recorrido.
¿Qué ocurrió?
La procesión avanzó lentamente rumbo al templo guadalupano, acompañada por familias, estandartes y vehículos adornados, en un trayecto que se extendió por más de tres horas.
Los participantes agradecieron a la Virgen de Guadalupe por la protección en carretera, los favores recibidos y la posibilidad de mantener su fuente de empleo.
Como cada año, el desplazamiento masivo provocó afectaciones al tránsito, con el cierre total del carril norte-sur del bulevar Isidro López Zertuche y de la avenida Emilio Carranza.
¿Cuál fue la respuesta de las autoridades?
Para evitar incidentes y regular la circulación, agentes de Tránsito Municipal se desplegaron en los cruces con avenida Universidad, Carlos Santana, Presidente Cárdenas y otras vialidades donde el flujo vehicular resultó comprometido.
A pesar de las complicaciones, la jornada transcurrió sin incidentes mayores y volvió a poner de manifiesto la fuerza organizativa del gremio transportista, que mantiene viva su devoción guadalupana año con año.