Scarlett Johansson apareció por primera vez en el Universo Cinematográfico Marvel en 2010, cuando pudimos verla a lado de Tony Stark en “Iron Man 2”.
Dos años después pudimos verla como una de las grandes superheroínas de la franquicia en las siguientes cuatro películas de The Avengers (Age of Ultron, Infinity War y Endgame) y entre los lanzamientos de estas mismas, donde también tuvo una serie de apariciones en dos de las películas de Capitán América y hasta en Capitana Marvel.
Después de una década como parte del UCM, por fin podremos ver en pantalla grande una película basada en la vida de Black Widow, misma que se estrenará el próximo 9 de julio tanto en cines como a través de Disney+, la plataforma de streaming.
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A pesar de los rumores que se difundieron durante los últimos años respecto a la muerte del personaje y su posible reencarnación, Marvel nos ha dejado claro que esa no será la trama que se maneje en esta nueva producción.
Tras la fama que representó formar parte de la franquicia, Scarlett se convirtió en una de las actrices mejores pagadas del cine, ha sido nombrada por la revista Time como una de las celebridades más poderosas del mundo.
A pesar de que, aparentemente, su historia había terminado, tener su propia película es el cierre que necesitaba para despedirse del Universo Marvel.
Después de una década, esta será la última vez que veremos a Scarlett en la piel de Black Widow. Sin embargo, a pesar de todo el éxito que representó para ella, este personaje también fue un reto que la obligó a enfrentarse a una hipersexualización por parte de los fans y los mismos medios de comunicación.
