Una ciudadana rusa mató a su pareja tras una acalorada discusión y colocó el cadáver en su cama, donde este permaneció durante una semana hasta que el olor que desprendía obligó a la mujer a bajarlo al sótano, informaron hoy los medios locales.
Los hechos tuvieron lugar a finales de mayo en la ciudad de Kazán, capital de la república rusa de Tatarstán, según el canal Tatarstan-24.
La cadena sostiene que el homicidio ocurrió durante una pelea entre una mujer de 42 años y su novio, de 62, cuando ambos estaban bajo los efectos del alcohol.
Al parecer, en medio de la discusión, la mujer agarró un cuchillo y le asestó un golpe fuerte en el cuello a su compañero, provocando la fractura de varias vértebras cervicales y la muerte instantánea del hombre.
Posteriormente, la homicida trasladó el cuerpo de su pareja a la cama y continuó acostandose a su lado cada noche "como si nada durante una semana", asegura el canal ruso.
Al mismo tiempo, después de que el cadáver empezara a desprender un fuerte olor, lo que hacía que "no se pudiera respirar en la casa", la mujer lo envolvió en unas cortinas y lo bajó al sótano de la casa.
Fueron los parientes de la víctima los que alertaron a la Policía de su desaparición tras pasar una semana sin conocer su paradero.
Los agentes que se personaron en la vivienda de la presunta asesina dieron con el cadáver y los investigadores averiguaron que la mujer había aprovechado el tiempo para vender algunas "cosas de valor" de la casa de su pareja y "vaciar sus tarjetas bancarias".
En la actualidad, la mujer está a la espera del juicio por asesinato.