Shanghái, China.- Se suspendieron los servicios de trenes, autobuses, cerraron cines, bares y se pidió a los habitantes no salir a las calles, debido a un brote de SARS-CoV-2; la medida surgió en Putian, una ciudad de 2.9 millones de habitantes en la provincia de Fujian, ubicada al sur de Shanghái.
Sólo se permitirán los viajes estrictamente necesarios y los que deseen abandonar el área metropolitana, deberán tener una constancia negativa al virus en las últimas 48 horas, anunció el Gobierno.
China declaró bajo control al coronavirus a comienzos del 2020, pero últimamente sufrió brotes de la contagiosa variante Delta; las autoridades insisten en que la mayoría de los casos, son personas provenientes del extranjero como Rusia, Myanmar u otros países.
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En Putian, surgieron 19 casos nuevos de transmisión local en las 24 horas hasta la medianoche, informó la Comisión Nacional de Salud; uno de ellos fue detectado en Quanzhou, otra ciudad en la provincia de Fujian.
Los primeros pacientes en Putian fueron de estudiantes del condado Xianyou; expertos sospechan que el brote se originó en el padre de un alumno, que regresó de Singapur el día 4 de agosto.
El viajero identificado como Lin “N”, estuvo 14 días en cuarentena y sus pruebas subsiguientes dieron negativo, señalaron autoridades locales y añadieron que el viajero dio positivo el viernes.