La tormenta tropical Ivo, que se formó el 6 de agosto frente a la costa del Pacífico mexicano, avanza sin tocar tierra, pero provoca condiciones meteorológicas adversas en el occidente del país. Con vientos sostenidos de 65 km/h y rachas de hasta 85 km/h, se desplaza hacia el oeste-noroeste a velocidades de entre 33 y 37 km/h, y aunque permaneció en categoría tropical, los pronósticos indicaban su posible intensificación a huracán categoría 1 en las siguientes horas.
Estados afectados
Jalisco y Guerrero: lluvias puntuales intensas de 75 a 150 mm.
Colima y Michoacán: lluvias muy fuertes de 50 a 75 mm.
Baja California Sur, Oaxaca, Chiapas y otras entidades del sur y centro: chubascos, frecuentes descargas eléctricas y posibles inundaciones localizadas.
Oleaje y vientos
Las costas de Jalisco, Colima y Michoacán enfrentan oleaje elevado de 4 a 5 metros, con restricciones a la navegación. En Guerrero, las olas alcanzan alturas de 3 a 4 metros. Algunas entidades del sur reportan oleaje menor, pero aún peligros de corrientes y rachas de viento severas.
Evolución del fenómeno
El Servicio Meteorológico Nacional y el Centro Nacional de Huracanes anticiparon que Ivo mantendrá progresivamente su curso paralelo a las costas mexicanas antes de desviarse hacia el oeste y alejarse del territorio nacional. Se pronostica que se intensifique hasta convertirse en huracán categoría 1 y posteriormente se debilite, regresando a tormenta tropical y degradándose a baja presión antes del domingo 10 de agosto.
Recomendaciones y precauciones
Las autoridades de Protección Civil del SMN y Conagua han alertado a la población sobre posibles deslizamientos, encharcamientos, caídas de árboles y cortes en el suministro eléctrico en zonas urbanas y rurales afectadas por las lluvias. Se ha instado especialmente a evitar zonas de riesgo, atender señalizaciones oficiales y suspender actividades de navegación en puertos afectados.