Los Recicladores Unidos de Bolsas Plásticas, quienes se dedican al reciclado principalmente, han puesto a trabajar a sus empresas en la fabricación de bolsas para cadáveres.
Bolsa de óbito, bolsa mortuoria o bolsa para transportar cadáveres de dos metros de largo por 78 centímetros de ancho, cada una de estas bolsas tiene un cierre central, resisten hasta 200 kilos de peso y no dejan escapar ningún líquido.
Son las bolsas que el Gobierno federal compra en esta emergencia sanitaria.
En una planta ubicada en Ecatepec, Estado de México, la contingencia transformó el negocio, antes las bolsas eran para la basura, hoy la demanda la está generando hospitales y funerarias.