A casi dos meses de los casos en los que maestros fueron agredidos por alumnos —uno en la Secundaria No. 35 de Monclova y otro en Saltillo—, el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) exigió a la Secretaría de Educación del Estado un cambio en los protocolos de atención para garantizar igualdad y justicia en los procesos.
El delegado de la Sección 5 del SNTE en la Región Centro, Arturo Gómez, señaló que hasta la fecha no se ha emitido un resolutivo en ninguno de los casos, a pesar de que los hechos ocurrieron hace uno o dos meses.
"Pedimos que haya igualdad para todos. Si un maestro es acusado de agredir a un alumno, se le separa de inmediato mientras se investiga; cuando sucede al revés, no pasa lo mismo", expresó el dirigente sindical.
Gómez informó que actualmente existen tres casos activos de agresión o insultos hacia docentes en proceso de análisis jurídico, sin que hasta ahora haya una resolución por parte de la Secretaría de Educación o del área legal correspondiente.
El representante sindical subrayó que la educación y el respeto inician en casa, y que los maestros solo refuerzan esos valores en las aulas. Explicó que, en los casos recientes, no se ha detectado el consumo de sustancias tóxicas entre los estudiantes agresores, sino que las conductas derivan de problemas familiares o emocionales.
"Muchos de estos jóvenes están pidiendo ayuda sin decirlo, por eso los casos se canalizan con especialistas y psicólogos", añadió.
Reiteró que el SNTE prioriza el diálogo y la comunicación sobre cualquier forma de confrontación, pero no tolerará ningún tipo de violencia, venga de quien venga.
"No aceptamos violencia ni de maestros hacia alumnos, ni de alumnos o padres hacia los maestros. Los tiempos son difíciles y por eso pedimos que los protocolos cambien para proteger a todos los que forman parte del entorno educativo", puntualizó.
Finalmente, Gómez insistió en la necesidad de una investigación justa y equitativa en todos los casos de agresión dentro del ámbito escolar.
"Debe haber el mismo trato. Si un maestro es separado al ser acusado, lo mismo debe aplicar cuando un alumno agrede. No pedimos privilegios, pedimos igualdad y cero tolerancia a la violencia", concluyó.