Mantienen la vigilancia de alrededor de 100 establecimientos, con el objetivo de garantizar el cumplimiento de los horarios autorizados para la venta y consumo de alcohol durante las fiestas de Navidad y Año Nuevo.
Amador Garza, director de Ingresos, informó que el padrón supervisado incluye tiendas de conveniencia, minisúper, cantinas y restaurantes-bar, sumando entre 90 y 100 locales que solicitaron el permiso de ampliación de horario.
Detalló que los costos varían según el giro y tamaño del negocio: las tiendas de conveniencia de cadenas pagan entre 3 mil y 4 mil pesos; los establecimientos más pequeños alrededor de 2 mil 500 pesos; mientras que los agremiados de cantineros cubrieron una cuota de mil pesos.
Precisó que el padrón total de establecimientos dedicados a la venta o consumo de alcohol es de aproximadamente 350, aunque no todos solicitaron la ampliación de horario debido a las zonas donde se ubican. Explicó que se priorizan los puntos con mayor volumen de ventas y que algunas cadenas, pese a contar con más sucursales, únicamente tramitaron permisos para ciertos establecimientos; por ejemplo, una cadena solicitó autorización solo para 10 tiendas.
Garza señaló que, hasta el momento, todos los negocios están cumpliendo con los horarios establecidos y no se han registrado incidencias. Incluso, comentó que algunos establecimientos optan por cerrar más temprano, aun contando con el permiso, debido a factores como el clima frío que reduce la afluencia de clientes.
Como ejemplo, indicó que una reconocida cadena de tiendas de conveniencia, con más de 130 sucursales, pagó permisos únicamente para cerca de 40 establecimientos. Finalmente, el director de Ingresos informó que, a la fecha, se tiene registro de aproximadamente 10 negocios de este giro que cerraron definitivamente, mientras que otros cambiaron de domicilio, principalmente porque en la Zona Centro dejaron de ser redituables.
Amador Garza destacó que la vigilancia es fundamental para asegurar el cumplimiento de los horarios y evitar problemas en las festividades, lo que beneficia tanto a los consumidores como a los propios establecimientos.