La familia de Francisco Alejandro N. vivió días de angustia y desesperación al buscarlo sin descanso, sin saber que el hombre estaba siendo señalado como sospechoso de un delito grave.
Desde el pasado jueves por la tarde, sus hijas lo buscaron por todos lados, incluso recurriendo a páginas de noticias en redes sociales para pedir ayuda. "Salió de casa sin su celular y no ha regresado. Por favor, si alguien sabe algo, ayúdenos a encontrarlo", decía la publicación que compartieron.
Sin embargo, la situación tomó un giro inesperado cuando Francisco fue capturado mediante una orden de aprehensión, fue presentado ante un juez en una audiencia virtual, donde se le formuló la imputación por abuso sexual a una niña de 8 años.
El juez de control vinculó a Francisco a proceso y le impuso la prisión preventiva oficiosa y justificada, considerando que las pruebas presentadas eran suficientes para continuar con la investigación del caso.
Aunque la audiencia fue privada debido a la naturaleza delicada del caso, se conoció de manera extraoficial que el hombre aceptó haber cometido un delito contra una menor, aunque no específicamente del caso que se investiga sino de otro.