Medios de comunicación de la Región Centro participaron este viernes en una capacitación impartida por Inspira Coahuila, programa del Gobierno del Estado, enfocada en la responsabilidad social de los medios ante la difusión de información sobre conducta suicida.
La jornada, dirigida a reporteros, jefes de información y comunicadores de distintos municipios, buscó fortalecer criterios éticos y buenas prácticas para evitar daños colaterales derivados de una cobertura inadecuada.
La capacitación se desarrolló en un formato interactivo: análisis de casos reales, exposición de experiencias en campo y discusión sobre qué hacer y qué evitar al informar sobre conductas suicidas. Los asistentes coincidieron en que los medios enfrentan un reto permanente: equilibrar el deber informativo con el impacto emocional y social que este tipo de contenidos puede generar, especialmente entre adolescentes y jóvenes.
Durante la sesión se presentaron datos relevantes sobre la situación en México. Entre ellos:
En 2020 se registraron 7,818 fallecimientos por lesiones autoinfligidas, lo que representó el 0.7 % de todas las muertes del país. La tasa nacional se ubicó en 6.2 casos por cada 100 mil habitantes. El grupo de mayor riesgo es el de jóvenes entre 18 y 29 años, con una tasa de 10.7 casos por cada 100 mil. Por sexo, los hombres presentan una tasa de 10.4, mientras que las mujeres 2.2 por cada 100 mil habitantes. Estas cifras evidencian la necesidad de un manejo responsable de la información y de evitar narrativas que puedan detonar conductas imitativas.
El Efecto Werther: lo que la mala información puede provocar. Dentro de la capacitación se explicó el llamado Efecto Werther, concepto identificado por el sociólogo David Phillips, que describe cómo la cobertura inadecuada de casos de suicidio puede desencadenar más casos por imitación. Por ello, se insistió en evitar publicaciones con detalles sobre métodos, lugares, imágenes o lenguaje sensacionalista, prácticas que aumentan el riesgo de replicación en personas vulnerables.
"Debería existir una ley que prohíba publicar suicidios". Uno de los puntos más debatidos fue la ausencia de sanciones para los medios que continúan publicando casos de suicidio de manera explícita o sensacionalista. Aunque existen lineamientos internacionales y nacionales, como los emitidos por la OMS y algunas guías del propio estado, no hay una ley con sanciones claras que obligue a los medios a respetar las recomendaciones de no publicación o publicación responsable.
Los asistentes coincidieron en que regular este tema con un marco jurídico podría ayudar a reducir prácticas dañinas y reforzar la ética profesional en el ecosistema mediático.
El Efecto Werther advierte sobre el riesgo de imitación en casos de suicidio.
Finalmente, los comunicadores destacaron la importancia de construir narrativas que: informen sin poner en riesgo a terceros, aporten datos y señales de prevención, integren rutas de atención y contactos de ayuda, y eviten la estigmatización y el morbo. El taller concluyó con el compromiso de fortalecer una cobertura más humana y responsable, entendiendo que la labor periodística puede salvar vidas cuando se ejerce con ética, sensibilidad y conciencia social.