Monclova, Coahuila. A tres años del colapso de Altos Hornos de México (AHMSA), las secuelas no solo son económicas, sino también emocionales y psicológicas para cientos de ex trabajadores. Jorge Andrés González Flores, ex obrero con 33 años de antigüedad, afirma que la incertidumbre prolongada ha detonado cuadros de ansiedad, estrés y desesperación, una situación que asegura comparten muchos de sus compañeros.
"Cualquiera pensaría que es puro estrés, pero esto me está afectando de verdad. Tengo deudas que no perdonan: tarjetas de crédito, recibos de luz, gastos diarios. No puedo conseguir un trabajo estable porque no tengo mi baja, y eso me tiene atrapado", expresó.
González Flores explicó que la falta de ingresos y de una resolución legal ha generado afectaciones emocionales persistentes. "Traigo una laguna mental que no se me quita de la cabeza. Ayer vi el mensaje del síndico y otra vez me volvió todo: la desesperación, la tristeza, el coraje. Esto ya quema".
Impacto en la comunidad
Señaló que muchos ex obreros atraviesan la misma situación, padeciendo ansiedad, insomnio y estrés constante ante la imposibilidad de rehacer su vida laboral. "No soy el único. Después de tres años, la mayoría hemos tenido que deshacernos de bienes, vender cosas que teníamos para sobrevivir. El patrimonio se va acabando y la incertidumbre sigue".
Desesperanza ante la falta de soluciones
De cara a la temporada decembrina, el panorama es especialmente duro. "Esta Navidad va a ser triste. Teníamos la esperanza de que en 2025 esto se solucionara. Se hablaba de un acuerdo, de una intervención presidencial, y muchos hicimos planes con la ilusión de que por fin nos pagarían lo que nos deben".
Al no concretarse una solución, el golpe vuelve a sentirse con fuerza. "Otra vez nos vamos para abajo, otra vez la depresión, otra vez empezar de cero", lamentó.
El testimonio de Jorge Andrés González Flores evidencia que la crisis de AHMSA no solo dejó desempleo, sino una afectación emocional colectiva entre miles de ex trabajadores que continúan en espera de justicia laboral y certidumbre para sus familias.