Ejidatarios del municipio de Múzquiz sostuvieron una reunión con el delegado de la Fiscalía General del Estado, Delegación Carbonífera, Diego Garduño Guzmán, con el objetivo de exponer la creciente preocupación por el alto índice de abigeato que les afecta.
El encuentro se llevó a cabo en un ambiente de diálogo abierto, donde los productores del campo manifestaron su inquietud ante los constantes robos de ganado que han mermado su economía.
Durante su intervención, Garduño Guzmán aseguró que la Fiscalía está comprometida con la seguridad del sector campesino y que se atenderán todas las inquietudes planteadas por los ejidatarios.
"Es prioridad para nosotros garantizar la tranquilidad de quienes trabajan la tierra y dependen del ganado para subsistir", expresó el funcionario, quien también reconoció la necesidad de reforzar las acciones de vigilancia en las zonas rurales.
Uno de los asistentes compartió su experiencia como víctima de abigeato, relatando el robo de más de 15 cabezas de ganado, lo que representó un duro golpe económico para su familia.
"Lo que requerimos es más vigilancia en los sectores ejidales y tenemos plena confianza que habremos de obtener buena respuesta al respecto", señaló, visiblemente afectado por la situación.
Los ejidatarios coincidieron en que el abigeato no solo representa una pérdida material, sino también una amenaza constante para la estabilidad de sus comunidades.
Por ello, solicitaron la implementación de operativos de seguridad más frecuentes y la coordinación entre autoridades locales y estatales para frenar este delito que va en aumento.
El encuentro fue encabezado por Don Francisco Maldonado Olguín, presidente de la Unión de Ejidos en Múzquiz, y Leonel Gómez Camacho, tesorero, quienes agradecieron la disposición de la Fiscalía para escuchar y atender las demandas del sector.
Ambos líderes ejidales reiteraron la importancia de mantener canales de comunicación abiertos para lograr soluciones efectivas que protejan el patrimonio de los campesinos.