SABINAS, COAH.- A más de dos años del colapso de la mina de carbón El Pinabete, cinco de las diez familias de los mineros fallecidos formalizaron su petición para que la Fiscalía General de la República (FGR) atraiga el caso y sancione a los responsables de la tragedia. La solicitud fue presentada este martes, en el exterior de la funeraria donde velaban a José Rogelio Moreno Leija, el último trabajador cuyos restos fueron recuperados del sitio del desastre.
En el lugar, el abogado Juan Héctor Rico González, representante legal de las familias, informó que se presentó la denuncia por homicidio culposo con el objetivo de que se haga justicia y se establezca un precedente ante los constantes accidentes en la Región Carbonífera. Destacó que, aunque aún no pueden señalar a los responsables, la FGR deberá realizar las investigaciones necesarias para esclarecer los hechos y determinar culpabilidades.
Las viudas que encabezan esta acción legal son María Elena Chávez, esposa de Jaime Montelongo; Vidala Morales García, esposa de José Rogelio Moreno Leija; María del Refugio Huerta Hernández, esposa de Margarito Rodríguez Palomares; Carolina Álvarez Oviedo, esposa de Jorge Luis Martínez Valdez; e Hilda Alvarado, esposa de Mario Cabriales. Todas ellas han exigido que no se permita la impunidad en este caso y que se garantice la seguridad en las minas para evitar tragedias similares en el futuro.
El caso de El Pinabete se ha convertido en un símbolo de la precariedad y el peligro en el que laboran los mineros de la región. Desde el derrumbe ocurrido en agosto de 2022, los familiares han denunciado la falta de medidas de seguridad en las minas de carbón y la necesidad de mayor regulación para evitar más pérdidas humanas. La recuperación de los cuerpos fue un proceso largo y doloroso, marcado por la incertidumbre y la exigencia de respuestas.
Las familias ahora esperan que la FGR actúe con firmeza y agilice las investigaciones para deslindar responsabilidades. Su lucha no solo busca justicia para sus seres queridos, sino también prevenir nuevas tragedias en una industria que ha cobrado la vida de cientos de mineros a lo largo de los años.
