Las inundaciones en Texas han dejado al menos 131 personas fallecidas en la región de Hill Country y el centro del estado, debido a la crecida del río Guadalupe, según confirmó el gobernador Greg Abbott. Además, otras 150 personas continúan desaparecidas.
"Estamos viviendo una emergencia sin precedentes y necesitamos el apoyo de la comunidad, pero pedimos que todo voluntario se registre antes", enfatizó un portavoz del gobierno local.
La situación sigue evolucionando y los equipos de rescate continúan trabajando para localizar a los desaparecidos y brindar asistencia a los damnificados.
Las autoridades de la ciudad de Kerrville han solicitado a quienes deseen colaborar en las labores de ayuda que se registren previamente, con el fin de organizar los esfuerzos de asistencia de manera segura.
Un informe del New York Times reveló que a los funcionarios del condado se les negó repetidamente la financiación para un sistema de alerta de inundaciones de emergencia, a pesar de que en octubre habían advertido a FEMA que era "probable" que ocurrieran inundaciones mortales dentro de un año
