Gracias a una llamada telefónica entre la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, y su homólogo estadounidense, Donald Trump, se logró aplazar por 90 días la aplicación de aranceles del 30% a las exportaciones mexicanas, programados para entrar en vigor este viernes.
Sheinbaum calificó el diálogo como "muy bueno" y destacó que el entendimiento alcanzado permitirá avanzar hacia un acuerdo comercial de largo plazo basado en el diálogo bilateral. La conversación, de carácter estratégico, se dio horas antes del vencimiento del plazo para aplicar los nuevos aranceles, que aún no se ha definido si serían generales o específicos para productos fuera del marco del T-MEC.
Desde su red Truth Social, Trump confirmó que se mantendrán por ahora los aranceles vigentes: 25% al fentanilo, 25% a automóviles y 50% al acero, aluminio y cobre. Además, aseguró que México aceptó retirar varias barreras comerciales no arancelarias, como parte del compromiso mutuo para negociar durante los próximos tres meses.
Sheinbaum estuvo acompañada por el canciller Juan Ramón de la Fuente, el secretario de Economía Marcelo Ebrard y el subsecretario Roberto Velasco. Por parte del equipo estadounidense participaron altos funcionarios como el vicepresidente J. D. Vance, el secretario del Tesoro Scott Bessent y el secretario de Estado Marco Rubio, entre otros.
Ambas naciones reafirmaron su cooperación en temas fronterizos, especialmente en el combate al narcotráfico y la migración irregular, como parte de los compromisos paralelos al acuerdo comercial en discusión.
