“Te fuiste, me engañaste y ahora quieres regresar”
“La vida te cobra factura, no quieras recuperar lo qué tú mismo perdiste”.
Las retillas emocionales son heridas qué se perdonan pero no se olvidan, pues es difícil superar una traición cuando lo entregas todo. Es muy frecuente qué muchas personas qué hirieron profundamente a su pareja y familia quieran regresar, después de que les fue mal tocando fondo, entendiendo lo mucho qué perdieron por bajas pasiones.
Es válido empezar de nuevo, recibir y saber perdonar, lo injustificable es cuando cínicamente te va mal o te pagan con la misma moneda y por soledad o enfermedad, recuerdas qué tienes familia y una persona que en ese momento, dio todo por ti.
Las segundas partes no siempre funcionan, quién no valora lo que tiene una vez, no lo hará en una segunda oportunidad.
Un cambio genuino empieza cuando la persona es consciente de sus errores y trata de corregirlos comenzando por el mismo (a ) La soledad es la mejor aliada para aprender a reindicar tu vida, es aquí donde se valora y extraña, se quita lo qué te hace daño y se mejora aquello necesario para crecer como ser humano. Sin imponer el egoísmo qué a veces en lugar de ayudarte, te hunde más. Todo tiene solución en esta vida tan compleja, pero el tiempo no regresa para poder evitar las consecuencias de tus actos deshonestos, a veces tienes qué aprender a perder ya que toda acción tiene una reacción.
Se necesita mucha voluntad para tener un verdadero cambio, la sanidad emocional y espiritual son fundamentales para borrón y cuenta.
La atención psicológica es un medio viable para trabajar con aquello qué necesitas mejorar y sanar en tu ser. Mientras no se tenga disposición de cambio todo seguirá igual y la pena de la culpa y el hubiera, te seguirá para toda la vida.
Lic. Sergio Canizalez Ibarra psicólogo general, citas previas al WhatsApp 8662394782 y 8661380979