PIEDRAS NEGRAS, COAH. – Robos nocturnos, drenajes colapsados, calles sin topes, luminarias fallidas y basureros clandestinos son parte de la realidad diaria que enfrentan los vecinos de la colonia Ramón Bravo, al sur de esta ciudad, quienes acusan abandono institucional y falta de respuestas por parte de las autoridades municipales.
Durante un recorrido realizado por La Voz, habitantes de distintos sectores expusieron los problemas que desde hace años arrastran sin solución. La inseguridad es uno de los más sentidos: "En la madrugada se escuchan pasos en los techos, buscan qué robar. A veces andan drogados", relató una vecina que pidió el anonimato.
Ante ello, piden mayor patrullaje en las noches, ya que aseguran que los robos a patios y cocheras son constantes.
En el rubro de movilidad, los accidentes por exceso de velocidad han sido frecuentes. Dora Molina, vecina del cruce de Joaquín Herrera y avenida Bustamante, ha vivido en carne propia el riesgo: postes derribados, bardas golpeadas y daños a su vivienda han sido causados por vehículos sin control.
"Mi petición es clara: necesitamos topes. Hay muchos niños jugando en la calle y los coches pasan sin frenar", exigió.
Por su parte, Sebastián Arenas urgió al municipio a colocar bordos en la calle José María Bocanegra, donde los conductores circulan "como si fuera autopista". Vecinos coincidieron en que esa vialidad es una de las más peligrosas por la falta de medidas viales.
A los problemas de seguridad y movilidad se suma el rezago en infraestructura sanitaria. En calles como Frontera, La Madrid y Nadadores, el drenaje colapsa con cada lluvia. "El agua se estanca y se mete a las casas. Huele horrible y es un foco de infección", denunció un residente de Frontera.
Aunque han reportado la situación en cada temporada electoral, la respuesta ha sido nula. "Prometen arreglarlo, pero cuando ganan se olvidan", reclamó.
Además, los vecinos piden al Sistema Municipal de Aguas y Saneamiento (SIMAS) que cierre y limpie las obras que abre en la vía pública. En la calle La Madrid, entre Rodríguez y Bustamante, una zanja permanece abierta desde hace más de un mes, generando riesgos y suciedad.
En materia ambiental, una de las denuncias más preocupantes es la existencia de un tiradero clandestino a un costado de las canchas deportivas en la calle Barroterán, donde incluso han encontrado animales muertos. "El olor es insoportable y hay niños jugando al lado", alertaron.
Finalmente, Blanca Estela, residente de la calle Nadadores, reportó el fallo de dos luminarias que encienden de día, pero se apagan por la noche. "Pedimos que las reparen; vivimos en penumbras", solicitó.
La comunidad de la colonia Ramón Bravo clama por atención integral. Aseguran estar cansados de promesas incumplidas y de vivir con miedo, basura, aguas negras y accidentes. La exigencia: que las autoridades municipales actúen con urgencia y voluntad.
