La final de la Leagues Cup terminó con tensión y polémica luego de que el delantero del Inter de Miami, Luis Suárez, fuera captado escupiendo a un integrante del cuerpo técnico del Seattle Sounders, equipo que venció 3-0 y se coronó campeón del torneo.
Durante el encuentro, Suárez tuvo un par de oportunidades claras frente al arco rival, pero no logró concretar. Al término del partido, con el marcador ya definido, se desató una trifulca en el campo. En medio del caos, el atacante uruguayo se encaró con un auxiliar del equipo rival, mientras su compañero Óscar Ustari intentaba contener la situación.
A pesar del intento de Ustari por impedir el contacto, Suárez lanzó un escupitajo que quedó registrado por las cámaras, generando indignación y revuelo en redes sociales. Hasta ahora, ni la organización de la Leagues Cup ni la Major League Soccer (MLS) han emitido un pronunciamiento oficial sobre el comportamiento del jugador.
El técnico del Inter de Miami, Javier Mascherano, fue cuestionado sobre lo sucedido, pero afirmó no haber presenciado el acto. "A nadie nos gusta que al final del partido haya este tipo de acciones. Cuando hay una reacción, puede ser que haya una provocación, pero no sé qué es lo que pasó", comentó el estratega, sugiriendo que podría haber habido algún detonante previo.
Esta no es la primera vez que Suárez se ve envuelto en una controversia dentro del campo. Su historial incluye episodios que han generado debate y sanciones en diferentes ligas.
La derrota también representó un duro golpe para el Inter de Miami, que disputó su primera final de Leagues Cup con Suárez en sus filas, pero sin éxito. El equipo ya había ganado este torneo en 2023, aunque el delantero no formaba parte del plantel en ese entonces.
El incidente podría tener consecuencias disciplinarias para Suárez, dependiendo del criterio de las autoridades de la liga y del torneo.