MONCLOVA, COAH.— El cansancio del turno nocturno quedó en segundo plano cuando Moisés Barrón Salazar regresó a su domicilio, en la colonia Buenos Aires, y se encontró con una escena digna de telenovela barata: su esposa, Josefina Reina Olivo, no estaba sola, sino en brazos de otro hombre.
La sorpresa duró lo que tardó en encenderse el enojo. El acompañante resultó ser José Luis Gómez Anaya, de 37 años de edad, quien lejos de esconderse, aceptó sin rodeos que mantenía una relación con la mujer. Bastaron unos segundos para que la infidelidad descubierta se transformara en golpes, reclamos y orgullo herido dentro del domicilio.
Acciones de la autoridad
El pleito escaló rápidamente y, al ver que la situación se salía de control, la propia Josefina solicitó la intervención de las autoridades. Vecinos también reportaron el escándalo, lo que provocó la llegada de elementos de Seguridad Pública para poner fin a la disputa y evitar que el drama pasara a mayores.
Paramédicos del GRUM acudieron al lugar para brindar atención prehospitalaria a uno de los involucrados, quien presentaba diversas lesiones tras la riña. Aunque no fue necesario su traslado a un hospital, los golpes dejaron claro que la discusión fue algo más que verbal.
Detalles confirmados
Finalmente, los oficiales tomaron conocimiento de los hechos y elaboraron el reporte correspondiente. El saldo: una infidelidad expuesta, dos hombres golpeados por la realidad... y una madrugada que dejó claro que, a veces, llegar del trabajo trae sorpresas mucho más pesadas que el sueño acumulado.